NO PASA NADA... ¡TENEMOS A ARCONADA!.

No se muy bien cuando empezó mi pasión por la Real Sociedad. Pero desde que tengo uso de razón a sido el equipo de mis amores. Cualquiera puede pensar que soy de Guipuzkoa y que eso es lo mas normal, pero no, yo soy de Bilbao y vivo en Bilbao, (y muy orgulloso de serlo). No levantaba un palmo del suelo cuando ya vibraba con los colores Txuri-urdines. En mi casa, toda la familia a sido (y sigue siéndolo) del Athletic de Bilbao. Así que yo debo de ser la "oveja negra" que hay siempre en cualquier rebaño que se precie.

De todas formas, creo que la explicación de que sea de la Real es muy sencilla. Tiene un nombre, Don LUIS ARCONADA. El fue mi ídolo desde bien pequeño. Me gustaba verle volar, hacer aquellas paradas imposibles que tantos buenos momentos nos dieron. Su integridad y su profesionalidad siempre fueron su seña de identidad. No había rival que no sintiera respeto por él y creo que eso me marco desde bien pequeño.

Cuando era pequeño y cogía el balón, salía a la calle y trataba de emular sus paradas imposibles. ¡Cuantas veces llegaría a casa con las rodillas lastimadas y los pantalones rotos!. Pero yo me sentía orgulloso solo de pronunciar su nombre y de decir que era de la Real. Estaba solo ante el peligro, ya que todos los que me rodeaban eran del Athletic. Tenía que ver a la gente bajar a la ría de Bilbao a recibir a la gabarra y a sus campeones, pero no me importaba, yo me enfrentaba a todos y si las cosas no iban como esperaba les decía: "¡no pasa nada, tenemos a Arconada!".

Con apenas seis años me pasó algo curioso. Mi ama (madre en Euskera) me solía llevar con ella de compras y cada vez que íbamos a la carnicería del pueblo, el dueño me decía: "si te haces del Athletic yo te compro la equipación y te pago el carnet de socio". Pero yo me reía y le decía que jamás dejaría de ser de la Real. Que lo que yo sentía por aquel equipo y aquellos colores no se compraban con nada.

Fueron pasando los años y en casa mis tíos no sabían como hacer para que cambiara de equipo. Al vivir en Bilbao tenía complicado poder ver en directo a mi ídolo y solo lo podía ver por la televisión. Pero en 1989, cuando ya se sabía que esa sería su última temporada, mi aita (padre en Euskera) consiguió tres entradas para verle en San Mames. Mi aita, uno de mis tíos y yo nos dirigimos el 16 de abril de 1989 a ver el derby mas importante de los equipos de Euskadi. Recuerdo que estaba muy nervioso porque era la primera vez que iba a ver un partido de primera división y además estaría Arconada. Al llegar a los aledaños de San Mames, mi aita me compró mi primera bufanda de la Real y con ella al cuello entre en al campo todo orgulloso.

El partido fue apasionante. Con dos de los equipos mas fuertes en los últimos años en la Liga y con ocasiones para ambos equipos. Uno de los momentos claves del partido fue cuando el árbitro Paz García pitaba un penalty contra la Real, mi aita me miró y antes de que me dijera nada dije con determinación y bien alto, "¡tranquilo aita, ¡no pasa nada, tenemos a Arconada!", en aquél momento no me di ni cuenta de que estaba rodeado de gente del Athletic que me miraron confiados. El lanzador fue el central Txirri y como no podía ser de otra manera, ¡Arconada paró el penalty!. No creo que jamás haya sentido nada parecido. Fue increíble ver a mi héroe en acción. Fue entonces cuando me di cuenta de que todas las miradas de la gente que me rodeaban se clavaban en mi, aquel muchacho que segundos antes los había desafiado sin titubear.

Al final, el partido terminó con un 2-3 favorable a la Real con un gol de Loren en el minuto 84. Fue mi primer y último partido que pude ver a Arconada en acción. Pero salí de San Mames orgulloso de Arconada y de ser de la Real.

Terminada la temporada Luis Arconada y Jesus Mari Zamora se retiraban del futbol y una nueva era empezaba en la Real. Por primera vez en su historia la Real Sociedad fichaba un extranjero, John Aldridge. El experimento no salió mal y el jugador procedente del Liverpool cuajo un gran papel.

Los años siguientes llegaron mas jugadores extranjeros, (Richardson y Atkinson) pero las cosas empezaron a torcerse poco a poco y el equipo que tan buenos resultados había conseguido en la década de los 80 empezaba a tener altibajos.

Después de los tres jugadores Ingleses llegaron dos Portugueses y un desconocido Bosnio. (Oceano, Carlos Xabier y Meho Kodro). Tengo que decir que Carlos Xavier fue mi debilidad durante los años que jugo en la Real. Creo que es el extranjero con mas clase que hemos tenido en el equipo. Oceano era un líder en el centro del campo  con un físico increible y Meho Kodro era un seguro de gol.

En aquellos años, los ojeadores de la Real encontraban petróleo allí a donde iban. Y gracias a la gran cantera de Zubieta el equipo estaba en la zona media alta de la Liga. Llegando a pasearse por Europa en varias ocasiones.

En la temporada 93-94 hacía su debut con el primer equipo otro de los jugadores que a sido mi ojito derecho durante toda su trayectoria profesional. Javier De Pedro empezaba a jugar y a sacar sus centros perfectos desde la banda izquierda. Durante años hemos tenido la fortuna de disfrutar de la calidad de uno de los mejores zurdos de la Liga.

Pero las cosas fueron poco a poco complicándose y lo que antes eran grandes aciertos con los refuerzos del equipo, se iban convirtiendo en auténticos fracasos. Jugadores como Lee Chung Soo, Peiremans, Asper (haber disfrutado de Arconada y tener que habernos tragado a este portero…) Arif o el último fracaso Mc Donald Mariga (entre muchos otros) han conseguido que el club se meta en agujero sin fondo económicamente hablando.

Además, los personajes que pasaron por las oficinas del Club en los últimos años se han encargado de llenarse los bolsillos sin importarles ni la historia, ni la afición de nuestro equipo. Nos han ridiculizado innumerables veces con sus despropósitos, (Astiazaran y Badiola especialmente) y han arrastrado el nombre de la Real Sociedad vilmente.

Mientras todos estos "personajes" interesados en "salvar" a la Real una y otra vez, el equipo coqueteaba con el descenso. Infinidad de entrenadores se paseaban por el banquillo de Anoeta y rara era la temporada que alguno de los inclinos terminaba la temporada entera. Cierto es que en la temporada 2002-2003 casi conseguimos el campeonato de la mano de Raynald Denoueix, pero los nervios, al final, nos jugaron una mala pasada en Vigo. Al año siguiente el equipo jugo la Champions y llego hasta octavos de final. Parecía que las cosas empezaban a dar sus frutos pero esa temporada volvimos a las andadas en la Liga y poco después nos íbamos a Segunda División.

Desde hace muchos años han cambiado las cosas en la Real. Ya no se lucha por ganar trofeos e incluso hemos pasado tres años en el infierno de la Segunda División. En la temporada 2009-2010 la Real consiguió el ascenso y ahora, poco a poco el club, gracias al trabajo de la gente de casa y del anterior entrenador, Martin Lasarte, que puso los cimientos y Philippe Montanier que esta apostando por jóvenes valores empezamos a ver la luz al final del túnel.

Entre el año pasado y este, han aparecido jugadores como Antoine Griezmann, Zurutuza, Aguirretxe, Iñigo Martinez, Illarramendi, Ruben Pardo o Cadamuro. Estos jóvenes jugadores son el futuro de nuestro Club y estoy seguro que nos harán pasar grandes momentos. Hacía mucho que no se juntaban tantos jugadores en Zubieta con tanta clase como estos jóvenes "potrillos".

Para terminar, pese a lo sucedido los últimos años, yo me siento orgulloso de ser de la Real. Puede que no luchemos como el F.C.Barcelona o el Real Madrid por títulos todos los años. Puede que mis amigos me pasen por los morros la historia del Athletic una y otra vez cuando nos juntamos a comer una buena txuleta, pero mi sentimiento y mi corazón siempre serán Txuri-Urdines. Hoy es el día que puedo decir bien alto, que soy de Bilbao, ¡SI!, pero ¡SOY DE LA REAL SOCIEDAD!.

P.D. Además, todos ellos jamás podrán decir, "¡¡NO PASA NADA, TENEMOS A ARCONADA!!" como hice yo para enmudecer un templo como es San Mames.

Mikel Laita - Cirlan