Me voy a permitir la licencia de hablar sobre mis experiencias futbolísticas en Gran Bretaña. En el año 2005 viví en Londres por 6 meses. Disfrute de la ciudad en muchos aspectos y como no uno de esos aspectos fue el fútbol. Disfrute con el fútbol practicándolo en el parque (toda la gente que conozca Gran Bretaña sabe de que hablo) y lo disfrute como aficionado, la pena fue que el dinero no me permitía disfrutarlo como hubiera querido.
Recuerdo con nostalgia mis partidos en el parque. Viví en una zona de Londres muy agradable, Greenwich. Este barrio del sur de Londres conocido por dar nombre al famoso meridiano es un lugar esplendido para vivir. Abunda la gente joven ya que ahí se encuentra la Universidad de Greenwich, el Cutty Sark (uno de los últimos Clippers en ir a por te a las índias) esta próximo, hay una buena cantidad de pubs y bajo el Observatorio se encuentra el parque en el cual pase muchas mañanas de sábado y domingo jugando al fútbol. Estos días los gozaba como un niño. Me vestía mi camiseta rojiblanca, me calzaba las botas que para tal uso compre allí e iba al parque.
En un principio no conocía a nadie y entonces la magia del fútbol (del de verdad, del honesto) hizo que un simple balón umbro de 4 £ y las ganas de jugar consiguieran que un bilbainito se mezclara con unos ingleses y desde ese momento cada fin de semana jugáramos aquellos partidos que duraban horas. Tras el partido las pintas de rigor, si era domingo el “Sunday Roast” en el pub y disfrutar del partido de Premier por la tele. Quiero pensar que todo esto que disfrute no dista mucho de los partidos que a mediados del siglo XIX jugaban en cualquier campa y creerme que viví un poco de las raíces del fútbol en pleno siglo XXI.
Gracias a esos partidos conocí a gente con la cual todavía me trato. Uno de esos compañeros me hizo disfrutar de, hasta el momento, mi único partido en directo profesional. No fue ni el Tottenham, ni el Chelsea ni el Arsenal. No fue un partido de Premier League tan siquiera. Vi un partido de Championship entre el Millwall y el Reading. Visite The Den y alucine como siendo un equipo recién ascendido de la League 1 tenían mas publico que ciertos equipos de liga BBVA en España. No se si por que se hacen llamar los lions, por cariño al amigo que me llevo al campo siento simpatía por este equipo a pesar de todo lo que se y oigo de ellos.
Eso es la esencia del Futbol real.Un balón, un grupo de desconocidos y horas compartiendo un deporte puro y simple. Es una gran forma de hacer amistades y de aprender lo que es el compañerismo. Así me gustaría que mi hijo aprendiese a jugar al futbol. Gran articulo, felicidades.
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